sábado, 18 de septiembre de 2010

Ya llega.

Ya se acerca. Lo anuncian las primeras lluvias. Ese olor inconfundible a tierra removida. Esa brisa que apacigua los sofocos veraniegos, y la calma en que el mar queda, tras la temporada alta por excelencia.

Vuelven a salir zapatos de los armarios, y poco a poco llegarán las rebecas, los chandals, y las chaquetas, que ya refresca.

Es tiempo de ferias en los pueblos. De vendimia, y de aceitunas. El sabor del algodón de azúcar se mezcla con el olor a libros nuevos de mi infancia, y una música de coches locos suena al fondo en mi recuerdo.

El reencuentro con plastilinas y lápices de cera, ecuaciones y autores románticos recobra protagonismo, así como los llantos en las puertas de los colegios de los mas pequeños, aunque alguna lagrimilla sea de los mayores.

La vida pasa, pese a todo, y vuelven las viejas cosas con aires renovados.

Reencontraremos amigos, conoceremos a nuevos, mostraremos fotos exóticas, contaremos sueños de verano como batallas ganadas (aunque no hayan sucedido), aunque seamos conscientes de que las verdaderas aventuras están por llegar a partir de ahora... Y eso me hace feliz. Me ilusiona pensar qué nos podrá deparar la vuelta a esta nueva rutina que comienza.

Este es nuestro momento. Ya está aquí.

jueves, 22 de julio de 2010

No pienso hacerlo. ¿Me oyes?
Sé que suena muy egoista por mi parte, y, muy probablemente lo sea de verdad. Pero no voy a volver a caer en la misma trampa. Ya me la has puesto otras veces, lo sabes, y sé que eres tú. Siempre eres tú… O siempre soy yo. No lo sé exactamente. Pero no me importa… o si, pero no quiero que me importe.
Te prometo que voy a poner todo lo que pueda de mi parte, para evitar que eso ocurra, dejar que me importe me refiero, y me vuelvas a desgarrar el corazón en mil pedazos… o me lo vuelva a desgarrar yo sola pensando que puedo hacerlo. Porque lo pienso, sé que si me pusiera podría volver a hacerlo, pero no quiero, ¿me explico?. Otra vez no. Porque sé que vuelves a ser tú, con otra cara, con otro nombre, con otro porte y en otro lugar… pero sigues siendo tú... O sigo siendo yo. Y no quiero.
No voy a intentar de nuevo sacarte del pozo. Esta vez no. Porque sé que eres tú… o tal vez porque soy yo. Porque me consta que cuando intente darte la mano para salir de él, la tomarás, no me decepcionarás en esto. La agarrarás con fuerza, y te aferrarás a ella como si te fuera la vida, porque se te estará yendo. Me alentarás para que no desista en mi esfuerzo, verás pasar el mundo ante tus ojos y serás capaz de venderte al mejor postor por salir de ahí. Y yo te creeré… o no, pero querré creerte. Cerraré los ojos y si los abro miraré hacia otro lado, porque querré creerte. Todos a nuestro alrededor me advertirán sobre ti, pero querré creerte. Necesitaré creerte. Sabré que es mentira, que me estás engañando de nuevo, porque no es la primera vez que me cruzo contigo aunque no te haya visto nunca antes, ¿verdad que no, viejo amigo? Pero no lo haré.
Créeme que esta vez no lo haré, me ataré si hace falta a una montaña, evitaré escuchar tus cantos de sirena… pero no lo haré. No te daré la mano. No tiraré de ti para que te sientas mejor. No dejaré que me importe, aunque me importe de veras. No me convenceras de que eso es lo que quiero hacer…o no me autoconvenceré. Porque te conozco… o me conozco, y sé que aun así te daría la mano, tiraría con todas mis fuerzas, lucharía contra vientos y mareas para sacarte de allí. Y lo haría ¿lo sabes? Hasta caer exhausta, porque caería, créeme que caería, porque con tu impulso me dejarías caer… Y tu saldrías. Y yo me hundiría. Pero tu estarías fuera. Y estarías cansado por el esfuerzo hecho para poder salir. Y no tendrías ni fuerzas, ni ganas, para echarme una mano…
Se que suena muy egoista por mi parte, y sinceramente, es probable, que lo sea. Pero no, esta vez no.
Aunque no te conozca…sé que eres tú, que sigues siendo tú… o sigo siendo yo.
Y no.
No voy a salvarte.
No voy a salvarte de nuevo.
No voy a salvarte mas.

miércoles, 23 de junio de 2010

Lo verdaderamente importante.

En este tiempo de ausencia, he replanteado mi mundo, mis pensamientos, y mi forma de ver las cosas.
No puedo decir que tenga la mente mas abierta, pues realmente no sé si es así, y tal vez, haya vuelto un poco a mis orígenes, a mis fantasías de niña, a retomar y creer posible todas aquellas cosas que un día, (no recuerdo por qué motivo), decidí imaginar infantiles y dejar de buscar en este planeta, para vivir e integrarme en el de las personas adultas.

Por eso, porque le doy las gracias a la gente fantástica (en el sentido literal de la palabra) que me acompaña por estos caminos donde muchas veces sigo perdida, y no por ello dejan de alumbrarme, enseñarme y sorprenderme avivando mi ilusión en nuestro día a día, (y en el de los gnomos y demás criaturas vivientes). Porque yo también sigo viendo serpientes que se comen elefantes en vez de sombreros... Hoy os dejo con este breve poema de Mario Benedetti, sencillamente genial.

Disfrutad de él.

"Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo, un cutis de durazno, o como papel de lija. Le doy una importancia igual a cero al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco… o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportar una nariz que sacaría el primer premio en un concurso de zanahorias. Pero eso si, y en esto soy IRREDUCTIBLE… no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar, si no saben volar…. pierden el tiempo conmigo"

jueves, 8 de abril de 2010

Bienvenido Maestro

Me resulta curioso pensar cómo una persona puede entrar discretamente en la vida de otra, sin llamar la atención, y asentarse ahí, e ir tomando fuerza poco a poco, sin prisas, sin presiones y sin exigencias. Simplemente siendo y dejando ser.

No puedo, por mas empeño que pongo, recordar en qué momento te conocí. Me sonrojo al intentar recordar,(sin fruto por mas esfuerzo sobrehumano que realice), porque se supone que las chicas debemos memorizar ese tipo de detalles cuando se trata de alguien importante para una, y, aunque, sin pensarlo has pasado a ser alguien así en mi vida, no puedo poner en pie, cómo te conocí.

Probablemente nos conocimos un dia cualquiera, porque podría haber sido cualquier otro, entre un grupo de gente, con mas o menos vinculación amistosa entre sus miembros. Y por aquello de no ser descortés ni políticamente incorrectos con quien no conocemos, alguien nos presentaría.

Vivimos en un mundo donde todo pasa deprisa, y las cosas son cada vez mas efímeras, todo fluye, nada permanece. Me sentía estancada, sin lograr ubicarme en ningún sitio ni sentirme bien, perdida. Navegaba a la deriva, sin rumbo fijo.
Me sentía como si me encontrara en medio de una muchedumbre, donde cada persona habla una lengua diferente a la mia, la cual no entiendo, cada persona está en lo suyo, y yo sin saber que hacer, sin atinar a encontrar la salida para escapar de allí.
Y de repente, un buen día, la multitud empieza a apartarse, y comienzo a vislumbrar tu silueta, te veo, habías estado allí antes, pero no te habia visto, no había reparado antes en tu ser. Te acercas y dubitativa doy algunos pasos hacia tu cuerpo que se aproxima. Me agrada descubrir tu mirada fija en mis ojos, penetrante pero serena, tu sonrisa tranquilizadora y siempre alegre, y me tiendes una mano, sin dudar, firme, amiga, como si pudieras entenderme, como si quisieras mostrarme el camino...
He oido en alguna ocasión decir, que cuando el alumno está preparado, aparece el maestro.
Gracias maestro por haber llegado.

Retomamos

Siempre he querido escribir. Desde que tengo uso de razón, no ha habido regalo que me agrade mas que un cuaderno y unos lápices. Es algo que me motiva y relaja, aunque la relajación desaparece al rato de comenzar a hacerlo, cuando empiezo a sentirme la persona mas torpe del mundo, al no saber encontrar en mi limitado vocabulario, las palabras adecuadas, para describir la multitud de sensaciones que se me antoja expresar para cada situación que imagino en mi cabeza.
Cada vez que releo lo que he escrito, suelo reestructurar y cambiar de nuevo lo dicho, y el final es un montón de papeles emborronados y sin sentido lógico.
Conclusión, que aquí está mi blog desde principios de años que vio la luz, y sin ninguna actualización.
Por eso he pensado, hacer de este blog un cajoncito desastre donde quepan las cosas mas variopintas y dispares que pasen por mi cabeza, me emocionen, me disgusten o me llamen la atención.
Tambien se admiten propuestas para largas conversaciones e interesantes debates filosóficos que sabéis que me encantan.
Pues dicho queda.
Para comenzar, adjunto esta historia.
Feliz día.

domingo, 24 de enero de 2010

El principio

A caballo entre el 24 y 25 de un año recien estrenado, ve la luz por primera vez este blog, blog que nace desde la inexperiencia de esta personilla que escribe, de la intuición y de las ganas por descubrir cosas nuevas.
Sin brujula ni mapa, afrontamos este camino, junto con todo aquel que quiera unirse a nuestro caminar, tal y como vinimos al mundo, intentando buscar un lugar, intentando encontrar el rumbo, en esto que venimos llamando vida.